CADA VEZ QUE EL PSOE DE ALFAFAR HABLA DE ECONOMÍA MUERE UN GATITO

Hemos podido comprobar las últimas semanas que el PSOE de Alfafar no tiene diccionario. Ya no uno de la RAE, ni un triste ITER SOPENA de cole. Tranquis, os ayudamos:

Invertir: emplear una cantidad de dinero en un proyecto o negocio para conseguir ganancias.

Endeudar: hacer que alguien contraiga deudas. Verbo pronominal (endeudarse): contraer deudas.

Nuestra gente de Económicas quiere aclararle estos conceptos al PSOE de Alfafar, ya que llevan semanas negando los más de 40.000.000€ de deuda que dejaron cuando perdieron las elecciones de 2011, amparándose en un artículo de El País.

No vamos a negar que la publicación tiene su credibilidad, pero lo que no aclaran a la gente es que esa deuda de la que habla solo es bancaria, pero Alfafar debe mucho, mucho, mucho más.

A la vista, una aportación de nuestro vecino Julián Moyano, del 14 de diciembre de 2010, titulada “Mis nietos tendrá que asumir pagos comprometidos por el Ayuntamiento de Alfafar”:

http://www.jmoyano.com/blog/2010/12/14/mis-nietos-tendra-que-asumir-pagos-comprometidos-por-el-ayuntamiento-de-alfafar/

deudasMola ¿que no? Guardería Ninos, tanatorio, contenedores, polideportivo… El PSOE de Alfafar dice que todo esto no es deuda, que es inversión. Nos remitimos a las primeras líneas de este artículo.

Para invertir, tienes que tener un dinero, como el que invierte en letras del tesoro, en bolsa o en fórum filatélico. Pero el ayuntamiento de Alfafar cuando se metió en estos fregaos no tenía un euro, y de eso era consciente la concejala de hacienda de aquella época Rosa Ruz, hoy portavoz del PSOE de Alfafar. Pero no hizo nada por evitar que nos endeudáramos, que es lo que pasa cuando no tienes dinero y te pones a meterte en esta clase de proyectos como loc@.

Y es que el número 2 del PSOE de Alfafar José Antonio Redondo, concejal de urbanismo en aquella época, no se privó de unirse a la fiebre del ladrillo que en aquella época calentaba España, suponemos que pensando como decía Moyano, que ya lo pagarían nuestr@s niet@s.

Así que señores, señoras, vecinos y vecinas, sí estamos endeudad@s, mucho mucho. De inversión nada, porque en aquella época en las arcas municipales ya empezaban a tejerse las telarañas.

Dejen ya de decir estas cosas, o por lo menos antes de hablar, consulten a su miembro más célebre Juanjo Baixauli, que siendo catedrático de economía, puede evitarles hacer estos ridículos tan espantosos.

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